Pensar que vamos a tener un futuro por delante. No estoy segura si va a ser el mejor, si va a ser el peor. Si vamos a amarnos mutuamente, o si quizá nos vamos a odiar. No sé si vamos a estar viviendo juntos, ni si vamos a poder vernos incluso. Quizá eso que todos parecen llamar “destino” exista, y el nuestro no sea como esperamos, tal vez salga todo mal. Quizá seamos la más simple historia de amor, tal vez la más clásica, la verdadera, pero a mí me encanta. Tragedia, drama, comedia, todo… ¡Cómo el teatro! Quizá seamos la historia más interpretada en ese escenario, como Romeo y Julieta… Hasta quizá nosotros tengamos hijos, tan locos y lindos, víctimas de nuestro amor. Esa palabra, “víctima”. Somos víctimas del sentimiento “original”, el amor. Nacemos rodeados de amor, que por más chico que fuera, es amor. Ese que nos vuelve idiota, ese que nos hace creer que todo es posible, porque ni hasta los más grandes artistas pueden trabajar sin un poquito de amor. Necesitan inspiración, necesitan sacar eso que tienen adentro, que quizá a veces es enojo u odio, pero primero para sentir odio, tienen que sentir amor, si no saben lo que es amor, no saben lo que es el odio. Es todo muy rebuscado, lo sé. El amor es ese que nos hace creer que hasta lo imposible puede ser posible, que todos nuestros sueños pueden ser realidad. Necesitamos un poco de amor para creer que nuestros sueños pueden hacerse realidad. Mi inspiración de amor sos vos, necesito de tu amor para hacer realidad mi futuro, para hacer realidad mis sueños…
Y no te olvides que el amor lo puede todo, y que el nuestro lo puede más…
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